Volverte realidad...
Eras una visión superflua que destellaba ligeros esbozos
de
sentimientos ocultos,
Tu presencia era notoria, tu silencio audaz y tus voces
implacables,
a más de una decena enamoraste con tus encantos,
pero solo uno quebró tu firmeza, dejando la herida viva y a
flor de piel...
Extraña magia circula a tu alrededor, cuando la presencié
por vez primera
sentí un cosquilleo inquietante que me hacia dirigir la
mirada hacia ti...
ahí estabas tú, tus palabras permanecían inmortales, congeladas, fundidas,
atadas a un destino que germinaba y aun no nacía...
Cuantas horas esperabas atenta aquel llamado sordo y ausente
que nunca llegaría,
sin saberlo, fuimos supliendo esas ausencias, las tuyas, las
mías,
y con una suave y poderosa alquimia ambas empezaron a
descifrarse
dejando a un lado las pócimas más acérrimas del desamor...
de un cálido nido lleno de exquisitas sensaciones, desde el más
sutil tacto
que enciende la piel, hasta la más ardiente caricia de mis
labios sobre tu cuerpo,
postrado, quieto, receptivo, abierto a nuestras inéditas
formas de amarnos...
Sentir la pasión de tu corazón y sus latidos es una delicia
soñada,
sentir la erupción de tu piel hasta formar la cumbre de tus
volcanes es un rito inmaculado,
sentir el vaivén de tu cadera es un festín de fantasía,
sentir el encuentro de nuestras llegadas a tiempo es, simplemente
indescriptible...
Domino el panorama y en ello me extasío de tus paisajes,
digitar tu dorso es sentir las alas de tu angelical belleza,
restaurar el encuentro, escuchar tus sonidos, sentir tu
interior,
y en una descarga de energía colapsar en el amanecer,
hasta ya mas no poder...
Aquella visión es pasado… ahora nuevamente sueño volverte
realidad...
Ominnon Àhyos.
