Ah... mi amado México, tus contrastes, tus furias, tus recovecos. A veces pareciera que despiertas. Apasionado como ninguno, sangre caliente. Buscas te enfrentas, te aferras, festejas, aguantas, sobre todo, aguantas... has aguantado tanto...
Imagino que si fueras un paciente de siquiatría, tu doctor te diría que evades tus problemas. Que cuando algo serio o grave te ocurre, tiendes a distraerte y ocuparte apasionadamente en otra cosa, procrastinas, sólo para no pensar, como si tus problemas se desvanecieran en el viento por no pensarlos.
Así y todo, estamos en un momento eufórico de triunfo absoluto. Estamos a poco más de un mes de la peor derrota en nuestra historia, mi México. Donde el pirata- rey idiota, no se robó las elecciones, pero sí las compró. Como en el anuncio, lo aprendió de sus padres, y según él no hubo daño.
Y hoy el júbilo nos rebasa. ¡Oro!
¡la posibilidad del oro! Como gambusinos en la fiebre dorada no cabemos en nosotros mismos porque nos "vengamos" de Japón en el 68, cuando nos ganaron un partido de futbol.
¿Y cuándo nos "vengaremos" en realidad del 68, ganándole al dinosaurio que mató la democracia una vez más?
Nuestros triunfos son tan necesarios. ¡Bendita selección! ¡Benditas olimpiadas! ¡Benditos atletas que con todo en contra se las ingeniaron para destacar!¡Bendita la arquera de bronce que pasó 7 horas para votar, y estaba también de luto el día que anunciaron el triunfo del PRI! ¡Bendito el rey idiota que se las ingenia para meter la pata hasta para felicitar a nuestras atletas! ¡Que siga el circo!
Ahora, todas las protestas contra los medios: ¡Maldito televisa, muera TV Azteca, fraude, fraude, fraude!!! Pero... Terra está saturado y NO PUEDO PERDERME EL PARTIDO! ¡¡GOOOOOOOOOOOOOOOL DE MÉXICO!!!!
¡¡ORO Y VAMOS POR EL ORO SEÑORES: NOS VENGAMOS DEL 68!!
Resonó hoy, como hace un mes, el grito jubiloso del PRI y del grupo de Atenco...
La única diferencia, es que hace un mes lloramos, y hoy, hoy estamos en la gloria.
¡Bendito MÉXICO, que hasta de la muerte te ríes!
