Llegó a mis manos de una manera absurda. ¿Qué era aquello? Los recuerdos se enredan en mi memoria. Lo primero que pienso al ver el video es en las kermeses de la escuela, donde comprabas “dinero de feria” en el banco, y los boletitos con los que podías comprar comida, subirte a los juegos, concursar, pintarte la cara, “casarte”, “salir de la cárcel”, luego pienso en el “dinero” de los parques de diversión, o de los casinos.
Es una manera de tratar como niños a los adultos. Centralizar la riqueza, y darles “boletitos sin valor” a cambio de la moneda corriente, y ponerlos a jugar al trueque, con la ilusión de que ellos tienen el control económico. Un experimento tipo “ciudad de los niños”, esta vez aplicada a una pequeña comunidad indígena.
“El Espinal” es una comunidad de 24 mil habitantes en el norte de Veracruz, que, en un movimiento encabezado por maestros y profesores, decidió ponerse “en rebeldía monetaria”. Crear y reconocer su propio papel de intercambio, y empezar a girar su economía alrededor de otra moneda alternativa. Inventaron los “tumin”, palabra totonaca que significa dinero.
“La red tumista de “economía solidaria y autogestión”, así la llamaron los alevosos ”creadores” de este sistema. Es una “moneda alternativa”, que utilizan a manera de “cupones” en el trueque e intercambio de bienes de consumo..
Eso, sonaría interesante, ¿Verdad?, Una comunidad manejando el trueque con vales… una manera creativa de enfrentar la pobreza, fomentar la producción local y apoyar la economía de la comunidad. La duda que me llega a la mente, es, en un casino, el que emite las fichas, el que cambia el dinero real por “el simulado”, siempre gana: La casa siempre gana. ¿Quién es la casa, en este caso? ¿Quién emite los “tumines? Pues los ingeniosos defraudadores que le quitan a la comunidad el dinero real, y ponen a circular papelitos. Me es inevitable pensar en el gandallismo de estos cuates. Juan Castro, uno de los creadores de este proyecto, emite los “tumin”, y los intercambia, por pesos reales. De esta forma, -los creadores- “intercambian” los pesos por los "Tumines”, ellos se quedan con el dinero real, y ponen a toda la comunidad a jugar con papelitos impresos a color en un cybercafé, con una laser a color.
Les dejo el tema sobre la mesa. El “anarquismo” económico, ¿es la respuesta? ¿Eso queremos realmente?
Zyrduk